El restaurante más feliz del mundo
Por Pilar, el 03/04/2015
Alegre, entusiasta, emprendedor...y con Síndrome de Down. Diferentes, sí, como somos todas las personas unas de otras, pero dejan de tener los mismos sueños que cualquiera de nosotros. Puede que a veces la vida sea más complicada para ellos, pero este joven nos demuestra que con entusiasmo todo se puede hacer, incluso cuando hay motivos añadidos de dificultad.