El método Montessori

Por Pilar, el 15/02/2016

El método Montessori

El método Montessori se basa en un principio: " A los niños se les enseña". Busca la reforma educativa, metodología, psicología, enseñanza y preparación adecuada del profesorado, todo ello encaminado a fomentar el principio de que cada uno construye su propio aprendizaje. Todo su método se basó en lo que observaba que los niños hacian de forma "natural", relacionado con la capacidad innata para absorber el conocimiento que tienen a su alrededor, y el interés que observan por manipular cierto tipo de materiales sin ser dirigidos por los adultos. La meta de la educación infantil no debe ser llenar al niño de conocimientos académicos previamente seleccionados, sino cultivar ese deseo natural de aprender. Los niños son esponjas que tienen curiosidad por las cosas, y además lo hacen a su manera y ritmo: aprenden a leer, escribir, de forma espontánea, igual que lo hacen a gatear, caminar, o hablar.

Este sistema huye de cualquier técnica rígida, que son las que triunfaban en Europa en su época, finales del siglo XIX y principios del XX. Al niño hay que moldearlo y respetarlo, no hay que convertirlo en una reproducción exacta de los adultos. En este método se aprende por grupos, dentro de los cuales hay varios niveles, y los niños mayores ayudan a los pequeños, que a su vez recuerdan a éstos conceptos que tal vez ya han olvidado, se produce una retroalimentación entre ellos. No se fomenta la competencia, sino el respeto por cada uno de los alumnos y su ritmo. Aquí el educador es un guía, que propone o potencia cambios o desafíos. Se facilita la movilidad y el silencio. Se procura que el mobiliario esté adaptado a los tamaños y necesidades de los niños y las actividades que realicen en cada momento. El entorno y el material de las aulas están encaminados a que se desenvuelvan la parte social, emocional, intelectual, comprobación y necesidades morales del niño que también satisfaga necesidades de orden y seguridad.

¿Qué pasa con los errores? Se consideran parte del aprendizaje, y por eso no se castiga, sino que se valoran y se intregan como etapa del proceso de aprender. El niño es invitado a hacer autoevaluación y a ser consciente de cómo ha hecho las cosas. En resumen, los principios básicos fundamentales de la Pedagogía Montessori son: la libertad, la actividad y la individualidad. Otros aspectos abordados en ésta metodología son: el orden, la concentración, el respeto por los otros y por sí mismo, la autonomía, la independencia, la iniciativa, la capacidad de elegir, el desarrollo de la voluntad y la autodisciplina.

Imagen: Denise Krebs