La perseverancia es la llave de éxito

Por Pilar, el 19/10/2016

La perseverancia es la llave de éxito

Siempre tenemos cosas que aprender, por inquietud pura y dura, por necesidad... y no solo cuestiones académicas, también actitudes en la vida. Y no podemos desistir nunca de conseguir lo que queremos, porque sino, todo el esfuerzo empleado hasta ese momento no serviría para nada. Y por qué persistir en algo si no hay manera de hacerlo bien, de forma perfecta? precisamente porque en el último intento podemos conseguir nuestro objetivo o hacer que salga por fin de la manera correcta. Y porque si no estás, da igual la buena voluntad, el interés y el esfuerzo, si pierdes la capacidad de aguantar, por muy buenas que sean estas virtudes, no servirán para nada. 

Y además la perseverancia entrena el cuerpo, la mente y la voluntad para la resistencia, y nos hace más fuertes. ¿Quién no ha pensado en abandonar después de un primer día de gimnasio? si ese en el que sales con el cuerpo molido, en el que descubres que tienes músculos que ni imaginabas... y lo que te pide el cuerpo  y el cerebro es dejarlo, abandonar... claro, es que esto tenía que ser más fácil, ir un rato, sin sudar ni padecer y para casa. Pero el que persevera, primero sabe que todo cuesta, que algo tiene que sacrificar y sobre todo que el resultado siempre vale la pena. Verte sano, en forma y no ahogarte cuando corres para tomar el bus, no se consigue de la noche a la mañana, requiere de tiempo y de paciencia: mañana estarás un poco mejor, al otro más y en breve, el sufrimiento del primer día te dará hasta risa.

Y esta actitud es la adecuada en todos los ámbitos de la vida, con las amistades, la interacción con los demás, la educación de los hijos, los estudios. Todo requiere paciencia, pensar a medio plazo y de contar con lo que tendremos que emplear de tiempo y de esfuerzo. Además plantearse retos, realistas pero que sabemos que podremos llegar a conseguir,  proporcionan una gran recompensa cuando finalmente se alcanzarn y una gran satisfacción, porque lo vemos como una obra nuestra surgida de nuestra fortaleza.

Así es que perservera que casi nada es cuestión de suerte, y si das el primer paso, por lo menos te habrás empezado a mover. La perseverancia es una carrera de fondo, en la que lo importante es distribuir el esfuerzo y mantenerlo, y si te viene un pensamiento de abandonar, no lo permitas: piensa que solo el que persiste en su empeño llega a la consecución de sus metas.