Ayuda a tu hijo a defenderse de otros

Por Pilar, el 16/12/2016

Ayuda a tu hijo a defenderse de otros

Hay ocasiones en que un niño es cruel con otro en el colegio. A veces se trata de una tontería y en otras es una situación complicada para el menor. Los padres no pueden estar todo el día detrás de sus hijos para defenderlos, ellos son los que tienen que aprender a hacerlo por sí solos, pero hay que entender que no tienen muchas veces la capacidad ni de comprensión con lo que está pasando, ni de resolución de ese problema. No tienen la madurez necesaria para saber cómo se tienen que comportar ante el comportamiento cruel u hostil de otros niños como él. ¿En qué pueden ayudar los padres?

Hay que hablar y escuchar al menor para analizar si lo que nos cuenta es una situación puntual o se trata de un hecho continuado en el tiempo. No es lo mismo una rabieta por un hecho aislado, que la persecución diaria por parte de un niño que le hace la vida imposible.

Actuar y buscar una solución en la que el propio menor sea el que se aprenda a reaccionar defenderse. Sin heroicidades, y siendo realistas con lo que ocurre. Es aconsejable que ignore al niño que le molesta, y si no es suficiente y el otro no ceja en su actitud, hablar con un adulto y contarle lo que ocurre. No le sugieras que se comporte con el otro de la misma manera, no sería una solución y de alguna manera estarías justificando lo que ocurre si le das validez si lo hace tu hijo. En ningún momento le des a entender que no sabe defenderse, dejará de confiar en ti y se sentirá más indefenso todavía.

Si los intentos de alejamiento de ese menor no suponen una solución al problema, coméntalo en el colegio para que se lo comuniquen a sus padres. Puede que te digan que eres exagerado, que son cosas de críos, pero tienen padres que tienen que atajar un comportamiento cuando no es el adecuado. Justificando algo así solo hará que vaya a más. Que se comprenda que un niño cruel actúa así por algún tipo de problema no significa que se tenga que entender que lastime a otros, y si necesita atención también que la reciba.

Y sobre todo, que tu hijo note que estás a su lado. Refuerza su personalidad, para que aprenda a desarrollarse sintiéndose seguro de sí mismo, y a gestionar este tipo de problemas, y que no permita que nadie tenga una actitud agresiva hacia él.