Control de las emociones con inteligencia

Por Justina, el 15/05/2012

Control de las emociones con inteligencia

Introducción a los conceptos.

Los conceptos de emoción e inteligencia, el plano mental y el plano emocional, a veces parecen conceptos contrapuestos. Sin embargo, cuando se relacionan logran trabajar juntos de una manera muy efectiva. Tratar a nuestras emociones con inteligencia, aprender a manejarlas según nuestras necesidades, sacándoles todo el provecho posible, representa un gran cambio en nuestras vidas. Para comprender de que estamos hablando, démosle una mirada a los conceptos emoción e inteligencia por separado. Las emociones son reacciones que representan el modo en que nos adaptamos tanto a ciertos estímulos ambientales, como a los propios. Cada día recibimos infinidad de estímulos que apuntan directamente ahí, a nuestras emociones, a esas reacciones que tanto nos afectan, y en tan diferentes planos:

  • Psicológicamente, alterando nuestra atención, nuestra conducta y nuestra memoria.
  • Fisiológicamente, nuestro cuerpo genera una respuesta, comprometiendo músculos, la voz, la actividad del sistema nervioso y endócrino.
  • Conductualmente, establecen nuestra posición con respecto a nuestro entorno

Estamos hablando de estados afectivos, reacciones subjetivas al ambiente, influidas por la experiencia y que tienen una función adaptativa. Se refieren a estados internos como el deseo o la necesidad que dirige al organismo. Estamos hablando del miedo, la sorpresa, la aversión, la ira, la tristeza y la alegría, posiblemente el más importante en la búsqueda de un equilibrio vital, de una vida saludable, tanto en el plano psicológico, como en el físico. Grandes compañeras estas emociones, que sin embargo a veces actúan como un velo, que no nos deja comprender la realidad. Nuestra realidad. La intelegencia implica la habilidad de razonar, planear y pensar de manera abstracta, para comprender ideas complejas y resolver problemas. El concepto se refiere a la capacidad de comprender nuestro entorno y a nosotros mismos. La inteligencia nos permite aprender de la experiencia. Howard Garner desarrolló el modelo de las inteligencias múltiples , que propugna que no existe una única inteligencia, sino una multiplicidad de inteligencias diferentes. La inteligencia intrapersonal es aquella que se refiere a la autocomprensión, el acceso a la propia vida emocional, a la propia gama de sentimientos, la capacidad de efectuar discriminaciones de estas emociones y finalmente ponerles nombre y recurrir a ellas como medio de interpretar y orientar la propia conducta. Un concepto similar al que desarrollo Daniel Goleman, en 1995 con la Inteligencia Emocional Esto quiere decir que, a través de la inteligencia, tenemos la capacidad de manejar nuestras emociones. ¿Cómo? En la próxima píldora les daremos una serie de técnicas que los ayudarán en este proceso.