El secreto de la felicidad
Por Pilar, el 07/03/2016
No es necesario elegir entre éxito y felicidad, no tienen porque ser incompatibles si la búsqueda de uno no intenta suplantar a la segunda y nos impide disfrutar de nuestra propia vida. Está claro que sin unos mínimos que permitan una existencia digna es complicado plantearse la felicidad. Y que ésta no consiste en morir de éxito y más si para ello tenemos que estar estresados y sin un respiro. Tenemos que tener tiempo para dedicarnos a nosotros mismos, porque de otra manera es muy complicado focalizarse en lo que esperamos hacer en la vida. Es preferible parar un poco, respirar y observar y seguir adelante. Muchas veces la felicidad es tener la ocasión de ver crecer a un niño, o de disfrutar de un amanecer en la playa. Aunque no reporte ningún beneficio económico, ni sea algo que nos haga más deseables socialmente hablando.
Ser feliz es una actitud, es crearse unos hábitos que nos conduzcan a ella, porque es un camino, y como tal tiene un recorrido con grados de dificultad, con parones y situaciones que no siempre van a ser agradables, pero hay que pasar por ellas si queremos llegar a la meta. Y como todo camino, hay que disfrutarlo cuando lo realizamos, olvidar lo que ya no tiene solución, sacar aprendizaje del pasado, pero seguir hacia delante, y no dejar que el futuro nos obsesione excesivamente. En ocasiones pensar demasiado en lo que tiene que ocurrir solo nos produce estrés y además nos impide disfrutar de algo que no podemos recuperar si perdemos: el día de hoy.
No tenemos que ser demasiado duros con nosotros mismos, no siempre podemos estar al 100%, y no es sano exigirnos continuamente un éxito tras otro. Debe haber periodos de reposo y de descanso entre proyectos. Hay que intentar estar en calma con nosotros mismos y con nuestro alrededor, para poder estar alineados con lo que queremos, y también ser comprensivos con las metas de los otros. Forman parte de nuestra vida y nos acompañan en el recorrido y no siempre es fácil compatibilizar los objetivos de todos.
Tal vez el secreto sea tan sencillo como ser feliz mientras intentamos conseguir el éxito: saldremos ganando sea cual sea el resultado y disfrutaremos del día a día.
Imagen: Ignacio Palomo Duarte
