Estimula el cerebro de tu hijo

Por Pilar, el 22/03/2017

Estimula el cerebro de tu hijo

El cerebro es un órgano maravilloso que cambia muchísimo desde la concepción. Ya desde el nacimiento tiene casi todas las neuronas que tendrá a lo largo de su vida, en el primer año de vida duplica su tamaño y ya en el tercero, su volumen será el 80% del de un cerebro adulto. 

Tiene una cualidad, la plasticidad, que es la capacidad de regenerar sus neuronas anatómica y funcionalmente cuando hay estimulaciones ambientales. La respuesta cerebral es más compleja cuando son más exigentes. Para ello desarrolla una red de circuitos neuronales con neuronas capaces de ajustar las nuevas entradas y reajustar sus conexiones sinápticas, almacenar recuerdos, emitir respuestas eficientes a los estímulos o generar nuevos aprendizajes.

En los primeros años de vida va madurando, estableciendo continuamente conexiones neuronales con un crecimiento de sus estructuras. Hay muchas que no son eficaces para una función, y no se activan totalmente hasta que no se integran en una red cerebral que da respuesta a una conducta. Las conexiones que no se estimulan desaparecen, las otras se fortalecen.

En edades tempranas se adapta con mayor facilidad a ambientes e interacciones. Después, conforme envejece, se va especializando, las funciones son más complejas y es más difícil adaptarse a nuevos desafíos. Por eso los niños absorben la información de forma más eficiente que los adultos, y es tan importante conseguir que en su cerebro se creen autopistas neuronales. ¿Cómo puedes estimular el cerebro de tu hijo?

Que experimente con texturas diferentes

A través del tacto los niños exploran las texturas diversas que pueden encontrarse, y descubren como son los objetos que tienen alrededor. Esto les ayuda a estimular el desarrollo del lenguaje.

Que camine descalzo

Deja que camine descalzo. De esta manera fortalece sus pies y también sus piernas. Además se potencia el sentido del equilibrio y de la propicepción, que informa al organismo de la posición de los músculos y regula la relación del cuerpo con el espacio.

Hablando y leyendo al niño 

Ambas actividades mejoran la memoria, potencian el pensamiento y estimulan el aprendizaje del lenguaje de los pequeños. Además, escáneres realizados a niños a los que se les leía en casa, han demostrado que se producen cambios beneficiosos en su cerebro. Demostraban una mayor actividad en las áreas cerebrales que controlan la comprensión narrativa y la imaginería visual, lenguaje descriptivo.

Estimularle con rompecabezas

Los rompecabezas adecuados a la edad de cada pequeño sirven para potenciar su percepción visual y su coordinación, además de mejorar la memoria y el pensamiento crítico. Los niños que los utilizan mejoran las habilidades matemáticas de los niños y ayudan a predecir las capacidades espaciales que tendrán. 

Que juegue en la naturaleza

Pasar tiempo en la naturaleza beneficia su desarrollo físico, emocional, porque es un entorno que reduce el estrés y la fatiga. Su cerebro se vuelve más creativo, ya que tiene que ajustar su manera de jugar, dado que no tiene los juguetes de los que dispone en cas, y tiene que utilizar su imaginación para buscar otra manera de distraerse.