¿Para qué sirve la religión?
Por Pilar, el 25/04/2019

Esta pregunta posiblemente desconcierte. ¿Tiene que servir para algo? Me lo planteo porque si no es así, si no tiene algún tipo de beneficio, ¿qué sentido tiene ser religioso?
Cuando pienso en alguien al que defino como religioso, me viene a la mente una persona buena, recta, que tiene unos preceptos en los que cree firmemente y conducen su vida. Y lo hace porque su fe le dice que eso es lo correcto, además de que obtendrá un premio en la vida eterna y está convencido de que no hacerlo supondrá un castigo, también eterno.
Pero es que también hay personas bondadosas, rectas y honestas que actúan así sin tener como referente a un dios o a un credo concreto. Lo hace así porque es su manera de ser. ¿Entonces qué beneficios aporta seguir una religión?
Se suele alabar el sentido trascendente de la vida de las personas religiosas, a las que se les presupone mayor fortaleza en la vida. Algunos estudios aseguran que es bueno seguir cualquier religión antes que ninguna, aunque solo sea porque rezar y meditar tienen grandes beneficios para la salud mental e incluso física.
¿Se puede vivir sin creer en dios?
Se puede ser feliz como uno quiera, creyendo o no. La espiritualidad y la religión no hacen mejores o peores a nadie. Tal vez seguir unos preceptos aceptados socialmente y la promesa de una mejor vida ulterior sirva a mucha gente para tener unas normas de conducta, algo a lo que aferrarse en la vida. Pero eso no significa necesariamente felicidad. La religión se puede convertir en algo monótono e incluso vivirse desde el odio hacia todos aquellos que no practican la propia. No hay que explicar los desastres que se han producido y producen aún en el mundo a causa de la religión. Ni el profundo vacío del que un día, por el motivo que sea, pierde la fe.
Hay quien asegura que uno es ateo hasta que ve bien de cerca la muerte. Puede ser. Total no se pierde nada en un momento así, nadie más que uno mismo sabría que está renunciando a sus creencias. Lo cierto es que si dios existe, también sabrá apreciar y premiar los esfuerzos del que también ha llevado una vida honesta, aunque no lo hiciera en su nombre.