¿De qué va el autismo?
Por Pilar, el 25/10/2022

Seguro que alguna vez te has tropezado con alguien que no se comunica mucho con los demás y que parece vivir en otro planeta. Y también es más que probable que a la hora de explicar cómo es esa persona hayas utilizado el término autista. Pues puede ser que sin darte cuenta hayas dado en el clavo.
¿De qué va el autismo?
El trastorno del espectro autista, se llama así tiene varios grados de gravedad y diversos síntomas, es un trastorno del desarrollo en el que el autista tiene problemas para interactuar y comunicarse con otras personas. Es frecuente que ya de niños los autistas prefieran estar solos y ni siquiera tengan contacto visual con otras personas.
Pueden tener problemas con el lenguaje, que no se les entienda, que se limiten a repetir lo que oyen, o que el significado de las palabras sea interpretado por ellos de una manera diferente al resto.
Suelen tener patrones de conducta restringidos y repetitivos. Es frecuente que solo llame su atención algo en concreto y de manera exagerada, o que tengan rutinas que aparentemente no tengan ningún sentido vistas desde fuera.
Los primeros signos de alarma se dan a corta edad, alrededor de los tres años, cuando el niño no suele responder cuando se le llama o ni siquiera parece fijarse en las personas con las que convive.
Algunos niños pueden tener dificultades para aprender, mientras que otros tienen un coeficiente intelectual superior a la media y se adaptan con normalidad a la vida diaria.
A pesar de que cada caso es único, se puede pensar en el autismo cuando la persona en cuestión:
- No tiene contacto visual con su entorno y no responde cuando se le llama
- Le cuesta también el contacto físico
- No suele hablar con los demás o lo hace solo cuando es imprescindible, de una forma impersonal
- Parece que nada le afecta y no muestra emociones
- Cuando interactúa con otros no parece tener filtro, puede ser pasivo, agresivo o grosero
- Son incapaces de entender las señales del lenguaje no verbal y la ironía.
En cualquier caso, siempre que se presienta que a un niño le ocurre algo que no es normal, lo más razonable es acudir al médico. Un niño que no responde podría tener, por ejemplo, problemas de oído, y si no mira a las personas también podría ser un problema de vista. El médico será el que diagnostique el problema.
¿Qué causa el autismo?
Se desconoce la causa del autismo, aunque se cree que influyen factores genéticos y también medio ambientales. Los trastornos del espectro autista no tienen una única causa conocida, no hay dos casos iguales. Considerando la complejidad del trastorno y el hecho de que los síntomas y la gravedad varían, probablemente haya muchas causas. Lo que sí se sabe del autismo es que hay algunos factores que aumentan el riesgo de padecerlo:
- Si hay antecedentes familiares de autismo
- En bebés prematuros
- Cuando la persona ya tiene otros trastornos
- Los niños tienen cuatro veces más probabilidades de ser autistas que las niñas
La falta de interacción y de comunicación con los demás pueden ocasionar en el autista problemas de aprendizaje, problemas laborales, aislamiento e incapacidad de valerse por sí mismo, además de lo que repercute todo esto es la familia.
El autismo no se puede prevenir, pero un diagnóstico temprano es el mejor remedio, ya que el tratamiento ayuda a mejorar el lenguaje, las habilidades y la conducta, para que el autista mejore su independencia y calidad de vida.
Imagen: Anna Kolosyuk en Unsplash